Fotografía obra de Génesis Pérez.
A pesar de que la carga del cansancio
ya está atacando, aún me encuentro acá queriendo soñar. La vida nos muestra tantas maravillas en su
desarrollo que terminamos concluyendo con total seguridad una variedad de cosas
muy limitadas. Todo evento empezaría por una acción, toda acción por una
decisión, toda decisión por la conjugación de un deseo y un pensamiento; esto
en conjunto para dar como resultado un determinado escenario. Han pasado muchas
noches desde que yo entendiese (después de muchos malos ratos y diversas
lecciones aprendidas) que de esta forma se mueve el mecanismo de la historia.
Pero somos jóvenes todavía, en espíritu y convicción poseemos la misma chispa
vital con la que hemos empezado. Esa fusión exitosa de elementos poco
entendidos es la que nos llevará a alcanzar lo bonito de nuestra odisea propia,
ese clímax deseado en el que nos reconozcamos a nosotros mismos como seres
felices.