-Tributo al tanto-


Fotografía obra de Juan Mattey. Fuente original Flickr

Ahora mismo no tengo ganas de salir. Es mejor quedarme con la tarde en las manos, en la espalda y entre los ojos.


Entender que la vida no es un círculo, sino nosotros dando vueltas en ella. Sonreír declarando libertad en este país que hay en la sala de la casa. Abrir los brazos para pensar en nuevas ideas. Así, finalmente, continuar. Ahh… ¿cuantas veces he pedido continuar? Siempre hacia adelante, sin detenerse a pensarlo mucho. Como aquel que aún tiene sueños escondidos por ahí, debajo de las sabanas o en la cocina.

Ese es un buen pensamiento, caer en cuenta de las cosas que se disfrutan.  Un helado de mantecado; bailar con un tumbaito lento; cantar mientras la ducha nos refresca el cansancio de la distancia y la ausencia. También llorar un rato, para no dejar la costumbre. Llorar extrañando, anhelando o al aceptar nuevas situaciones. Llorar es por suerte un ritual que nos acerca al mar, hay que repetirlo de vez en cuando.

Irse a pasear a la luna sin ser astronauta, sin tener nave, sin necesidad de oxigeno. Porque es junto al amor de mis amores que puedo andar, perderme, encontrarme; todo mientras le tomo la mano creyendo en lo imposible. Hacerle el desayuno e intentar ganarme su corazón. Y que sorpresivamente me diga al oído “Loco, tú ya tienes mi corazón”, para la dicha del mio. Nunca tuve tanta suerte sino hasta aquel día en que sus ojos decidieron mirarme, quizás fue casualidad, quizás un accionar de las constelaciones. Estamos aquí, podemos trascender.

Seguiré viendo desde la ventana a los pajaritos, a esos recuerdos que gravitan afuera, a los vecinos que cruzan la calle. He decidido dejar las dudas por mis fantasmas, es preferible entenderlos. Así que por los cuentos del ayer; por los esfuerzos de tanta gente; por todas la letras que hacen al mundo girar; por el arte y la ciencia; por los libros, el internet, los caminos; por la historia y la geometría exacta de sus acontecimientos; por ti, por mi, por quien sea, es que se llevó a cabo este tributo.